El montaje estaba muy bien, eran cuatro grandes pantallas, en cada una se proyectaba parte de una escena, de una misma escena, imagen nítida, sugerente, hermosa, y al rato terminó porque todas las cosas terminan en un rato más o menos grande.
La sala, al acabar la proyección quedó con una tenue luz en la que lo único medio luminoso eran las pantallas que se veían de color gris claro; la gente, se levantó para ir hacia la salida y al pasar frente a ellas su cuerpo se convertía en su sombra, como si solo su intención hubiera ido ese día al museo, no se veía nada, no se apreciaban los ojos, ni la nariz, ni la ropa, solo perfilado, sólo sombras que caminaban por delante de las cuatro pantallas.
La sala, al acabar la proyección quedó con una tenue luz en la que lo único medio luminoso eran las pantallas que se veían de color gris claro; la gente, se levantó para ir hacia la salida y al pasar frente a ellas su cuerpo se convertía en su sombra, como si solo su intención hubiera ido ese día al museo, no se veía nada, no se apreciaban los ojos, ni la nariz, ni la ropa, solo perfilado, sólo sombras que caminaban por delante de las cuatro pantallas.
Me pareció super plástico, divino, alucinante, fuera de esas cuatro pantallas pero ópticamente como dentro de ellas se estaba dando una imagen viva de una situación en movimiento, no sé si alguien más lo apreció, dejé que todo el mundo saliera para salir yo ... y colocar los créditos.