TINTERO TERO TERO TERO ... TINTERO PAPEL
23 abr 2011
no me atrevo
5 feb 2011
¿dónde estás? ¿dónde estoy?
sombras
La sala, al acabar la proyección quedó con una tenue luz en la que lo único medio luminoso eran las pantallas que se veían de color gris claro; la gente, se levantó para ir hacia la salida y al pasar frente a ellas su cuerpo se convertía en su sombra, como si solo su intención hubiera ido ese día al museo, no se veía nada, no se apreciaban los ojos, ni la nariz, ni la ropa, solo perfilado, sólo sombras que caminaban por delante de las cuatro pantallas.
sin título
éste
8 oct 2009
Día UNO (5 de octubre de 2009)
22 ago 2009
13 ago 2009
Nada rima con nada
11 ago 2009
Vidas pasadas
Recuerdo perfectamente cuando era gato de hojalata, vivía lejos de la ciudad; lo sé porque primero vivimos en el centro, había un parque, y Anita me bajaba allí y jugaba conmigo en la arena, eso era incómodo porque por el agujero de darme cuerda me llenaba de tierra, además el lugar olía mal; pero un día, me metió en una caja y al mucho mucho rato me sacó, era otra casa, por una ventana se veía campo y Anita que estaba muy contenta me dijo:
- ¡Felix! – porque a mí me llamaba Felix, como el gato Felix de los dibujos animados de “Felix el gato”- me han regalado una cosa que te va a encantar, ya no te volverás a llenar de tierrita.
Y me enseñó una gran casa de muñecas, tenía tantas cosas como la de los humanos, y a partir de ese día yo ya viví en ella, olía a nueva aunque el papel de la pared estaba un poco despegado, pero era bonita, con muchas habitaciones.
En el salón, tenía un sofá de flores, y una alfombra también con flores pero más grandes que las del sofá, y el suelo era en blanco y negro como los tableros de ajedrez, uhy, allí había de todo, hasta una planta y cortinas y … bueno, todo lo que puedas imaginar.
Cuando jugaba a las meriendas, colocaba el reloj que marca las seis y media porque decía que esa era la hora correcta de merendar, y sacaba la cafetera y la taza de café, y el dulce, a mí me entraba mucha hambre viendo el papelito de la tarta de nata con piñones, pero como no era de verdad no me la podía comer.
Y tuve un compañero de juego, un playmobil futbolista al que mi amiga llamaba Raúl, desconozco por qué le puso ese nombre, pero no importa, lo que sí sé es que era una imitación porque le faltaba el número en la camiseta, o a lo mejor se le había despegado. Cuando nos veíamos me dejaba su balón que era más bonito que mi pelota de colores, era de plástico, no era de hojalata y eso me gustaba, pasamos buenas tardes jugando.
Pero cuando mejor me lo pasaba era cuando Anita me daba cuerda y entonces volteaba y volteaba por toda la casita, eso sí era divertido.
Luego, con el tiempo me rompí, y me reencarné en reloj-despertador Made in China, y hacía muchiiiiisimo ruido, pero esa es otra historia.
10 ago 2009
Mi ángel-bruja
Este es el ángel que tengo colgado del cristal de una de las ventanas de casa.
Hoy, cuando estaba mirando los correos por Internet, su sombra se reflejaba en una pared de la habitación, y … era la de una bruja, incluso se le adivinaba la nariz grande, como de buitre, y la barita se prolongaba pareciendo una escoba.
Tomé rápido la cámara para hacer la foto de la sombra, pero zas!!! Ya no estaba, miré hacia la ventana y nada, solo el rastro de la ventosa; voló, sí, de verdad.
Pero no me ha dado miedo, al contrario, ahora mi ángel me parece más humano, como más real, ahora sé que toma belladona y vuela.